Suspendido el pleno de Carballo por la interrupción del público

1.- "Non ten sentido suspender o pleno sen antes facer unha advertencia da obriga de comportarse".
2.- "cuando estuvieron en el pleno miembros de la plataforma contra la mina de Corcoesto, algunos hicieron comentarios en alto sobre su compañero Aurelio Núñez, «e non pasou nada»."

Veciños de Carballo no pleno de onte Luns

Noticia recollida en lavoz.es edición de Carballo.

  Por primera vez en la historia reciente -al menos desde 1979- un pleno de Carballo quedó suspendido durante el debate del orden del día. Eso sucedió ayer, sobre las 20.40 horas, por tanto a los diez minutos de haber empezado, cuando quedaban por tratar cuatro puntos (llevaban tres), además de las mociones a mayores de los grupos de la oposición. Fue en la cuarta cuestión (un trámite sin más: la modificación de la mesa local de comercio) cuando el público, casi 150 personas y con los carteles habituales de otras sesiones para protestar por tener que pagar la basura de las viviendas vacías (exigen un cambio en la ordenanza, igual que el PP y TeGa), comenzó a corear: «Queremos solución, alcalde dimisión». Era la misma consigna con la que habían recibido al regidor, Evencio Ferrero, cuando llegó a la sala, y durante unos tres minutos. [Durante los plenos, los asistentes no pueden hablar].

Después de eso, todo comenzó la sesión con normalidad: un minuto de silencio por la víctimas de la violencia sexista, la aprobación de la correspondiente declaración institucional y la declaración de apoyo a José Mato, preso en Colombia, instando a las Administraciones a que trabajen para agilizar los trámites de su proceso. Lo siguiente ya no se aprobó. Al escuchar los gritos, Ferrero suspendió la sesión y se marchó. Y con él sus compañeros de grupo del BNG, y unos segundos más tarde, los funcionarios.

Al principio se produjo un cierto desconcierto, porque algunos pensaban que se iba a reanudar. Tanto lo pensaban que la mayoría aguantó una hora más. Algunos incluso sugería quedarse toda la noche, pero no fue más que un comentario aislado.

Con posterioridad, Ferrero explicó que no quiso desalojar a nadie, pese a que la ley se lo permite (y los ejemplos son numerosos en las corporaciones locales, en el pasado y en el presente). «Un pleno non se pode facer coas interrupcións do público. Creo nas institucións e no bo comportamento e educación das persoas, e as cousas non se resolven pola forza, si con educación».

El portavoz del PP, Miguel Ferreiro, también lo valoró: «Non nos parece normal que ante a primeira manifestación que se fai dende o público se tome esa medida, sen sequera dar avisos sobre unha posible expulsión. Non ten sentido suspender o pleno sen antes facer unha advertencia da obriga de comportarse», señaló. Recordó que, cuando estuvieron en el pleno miembros de la plataforma contra la mina de Corcoesto, algunos hicieron comentarios en alto sobre su compañero Aurelio Núñez, «e non pasou nada».

Manuel Andrade, de Terra Galega (iba a presentar una nueva moción para cambiar la ordenanza, por cierto), considera que lo que pasó es una «tomadura de pelo», porque «a xente ten dereito á pataleta, a expresar a súa opinión, o alcalde pode pedir silencio. E se non lle fan caso en tres ou catro veces, tomar medidas, pero iso non o fixo, suspendeu sen máis».

Uno de los vecinos más activo, Manuel Pereira García, tomó la palabra casi una hora después, cuando ya solo había ediles del PP y TeGa, para animar a los presentes a acudir de nuevo al próximo pleno que se celebre. «Para defender o noso», indicó. Cree que la acción de Ferrero es «unha falta de educación», y lamentó que no haya habido diálogo.

La próxima sesión aún no se sabe cuándo será. Antes habrá que reunir a la mesa de portavoces y fijar el orden del día.